Llega Mayo, el mes de las flores, de la inocencia, la sangre alterada, el calor repentino, la lluvia templada... La mitad de la Primavera es como una joven experimentando la vida, ruborizada por el calor de la pasión, con la curiosidad que inspira la aventura de la existencia, siempre inocente.
Esta es la energía que vivimos en este tiempo y podemos sincronizarnos con ella y disfrutarla o resistirnos y sufrir alergias, astenia, estrés...
Desde mi experiencia tanto en las consultas con pacientes y en las clases con las alumnas he observado que la resistencia la Realidad nos causa malestar e incluso patologías, por eso es tan importante reconocer los ciclos de la Naturaleza y abrazarlos, abrazar la Realidad y vivirla desde la gratitud es un acto religioso, saludable y sanador. Por eso este año me apetecía tanto ofrecer herramientas prácticas desde la danza y el movimiento consciente para acompañar a la energía de estas fechas, aprovechar que este mes de Mayo las sesiones de Danza Rubayat serás de dos horas para plantear tres talleres intensivos:
La lluvia y el viento del Otoño ayudaron a los árboles a soltar sus hojas. Las hojas alfombraron la tierra llena de semillas que el viento y los animalillos depositaron allí, esa manta de ocres y naranjas húmedos y brillantes prepararon el terreno para mantener caliente el "Vientre de la Madre" ante la llegada del Invierno y sus nieves...
Así enlazando cada evento de las estaciones la Vida nos va recordando que es cíclica, que constantemente renace y se expande, se transforma infinitamente porque su naturaleza es el Amor. Lo vemos mas claro cuando se manifiesta en forma creativa, como ahora que los primeros brotes asoman entre la nieve, la luz crece, nacen corderillos y las parejas de lobos se aparean... Celebramos la Candelaria( recuerdo de fiestas ancestrales del fuego y la fertilidad) y San Valentín( adaptación de rituales sexuales de la antigüedad).
Ella es el trono donde Todo acontece.
Desde su vientre el Amor reina en la Conciencia.
Sus manos desatan tormentas y alimentan las almas que se acercan y se abren a Ella, transforman los sueños hasta que definitivamente desaparecen en el Océano de la Verdad.
Y.M.
La Fertilidad se da cuando tenemos los recursos y el espacio para la albergar la Creación. Dejar descansar al cuerpo para que recupere fuerzas y esos recursos y deshacernos de lo que ya no necesitamos para que haya ese espacio es sumamente importante, así como permitirnos ser creadores/as a imagen y semejanza de la Divinidad.
Hay infinitos caminos que nos llevan a infinitas puertas que son las entradas a una única Verdad: AMOR. A veces lo confundimos con distintos sentimientos o experiencias que no son sino estas puertas al espacio en eterna expansión del Amor.
La mente intenta definirlo, catalogarlo, etiquetarlo e incluso comprenderlo o explicarlo ( sin ningún éxito, por cierto), por eso es tan importante localizar sus caminos. Todos son prácticas sencillas y profundas (el desapego, el trabajo creativo, la contemplación de la Realidad…).
En esta Primavera que comienza me gustaría hablar de uno de esos sencillos y profundos caminos: La Apreciación.
Llegar a la Apreciación es tan sencillo como dirigir la atención a un detalle pequeño y encontrar su valor. No tiene porque ser a priori un valor trascendental, basta con que nos lleve a experimentar Aprecio,sabemos que estamos alado ese camino porque irremediablemente las comisuras de los labios se proyectan hacia el cielo, esta experiencia nos conduce a una grandiosa puerta al espacio del Amor: la Gratitud. Recréate en esta experiencia como quien observa un arco triunfal, una exuberante puerta al Paraíso, y eso que irrumpe y desborda tu corazón, tus sentidos y todo lo que eres es el Amor, indefinible, inclasificable, eterno, infinito,Real.
Yoneit M.
Este es el año de Neit, La diosa de la cosmología Egipcia que nos conecta con la Belleza, la Inteligencia, el Bienestar...la Perfección de la Divinidad.
Ella nos habla del "bienhacer", alimenta la creatividad para dar a luz obras de arte en cada acto, da sentido a la estética más alta: la de la belleza de la Naturaleza. Se manifiesta en cada acto y visión desde el mas modesto destello del rocío sobre el pasto a la carcajada de un bebé o la grandiosidad del crepúsculo. Canta con la voz de la Verdad del Instante, danza el fluir del tiempo en los brazos del dios Toth, se viste de las estaciones con sus elegantes colores e infinitos matices, perfectos, indispensables... Neit nos recuerda que SOLO HAY BIENESTAR Y LO DEMÁS ES FALSEDAD DEL SUEÑO DEL EGO.
Gracias Sagrada Neit por el bendito regalo de tu presencia.
Inspiradas en las esferas Temari tradicionales japonesas(bolas bordadas con un mensaje en su interior). Al descubrir esta manualidad se me ocurrió que sería un precioso trabajo para tomar conciencia del nuestro ciclo y profundicé en la simbología de cada paso de su elaboración.
Al comenzar el ciclo conectamos con el mensaje que la bola de Luna llevara en su interior a modo de semilla, puede ser escrito o simbólico ( un objeto , figurilla, dibujo...). Escogemos el material con el que fabricaremos la bola de Luna, tradicionalmente las Temari se hacen con arroz pero podemos utilizar tela, cereales, algodón... a mi me gusta usar retales de ropa que ya no voy a usar, como una despedida de las capas que voy quitándome en mi camino al Despertar .
Este material será la "tierra" en la que nos sembramos en esta Luna. Dejamos la "semilla" en el interior y hacemos un ovillo con hilo con la conciencia de la "Divinidad creando el Mundo". Cuando este creado un tejido muy tupido se divide la bola de Luna, trazamos las líneas con precisión y atención para conseguir simetrías, esta serán las guías para el trabajo del bordado.
Podemos elegir colores representativos, simbólicos, dejarnos guiar por nuestra intuición... Pueden ser bordados geométricos como en el tradicional Temari o mas figurativos, coserle piezas, conchas, medallas, espejos, botones...
Las bolas de Luna pueden ser ofrendadas al final de nuestro ciclo, como regalo para alguien a quien amamos, para nosotras mismas o para la tierra (si sus materiales son orgánicos).
Le devolvemos a la Tierra lo que nos dio en la Primavera, lo que nos adornó durante el Verano y ya no necesitamos, se lo entregamos a la Madre para que lo transforme y trascienda, pero no como un deshecho, le entregamos aquello que ya no necesitamos como una sagrada ofrenda con gratitud y Amor.
Una propuesta otoñal:
Deja caer tus hojas a la tierra como una ofrenda a la Madre, no como un desecho. Todo lo que vivimos y experimentamos viene de la Divinidad por lo tanto es bendito y sagrado,
Déjalas caer con gratitud y Amor igual que cuando la Primavera te hizo florecer.
Yoneit Maldonado